La Costa Oeste de Estados Unidos es, sencillamente, abrumadora.
Cuando estás en frente de alguna de las bestialidades que voy a presentar en este post, comprendes que allí todo es King Size, como sus camas de 2×2 metros, las cuales es posible encontrar hasta en el más miserable motel de carretera.
Voy a contaros sobre 8 lugares imprescindibles de la Costa Oeste de USA que no puedes perderte (alguno probablemente añadiría alguna más…y con razón, esta tierra tiene muchísimo), con un +1, un lugar extra que está bastante alejado del círculo habitual del “US west coast tour” pero que decidí incluir en mi “road trip” por razones que después descubriréis…
Pero basta de charla. Motor en marcha, encendemos radio (esta es una entrada con banda sonora, dale al play y prueba a viajar leyendo) y … a surcar el horizonte!!
Antelope Canyon y Horseshoe Bend
El alma de Arizona es de roca y arena rojiza. Esta se desnuda y resquebraja frente a nuestros ojos a través del imponente Gran cañón, pero guarda más tesoros escondidos para sí misma, que hay que buscar, indagar y conocer…Tomando Page como centro de operaciones, encontramos un cañón excavado en la arena y otro excavado en la roca.
El Horseshoe Bend es un meandro en forma de gigantesca herradura del río Colorado, situado a unos 6 km de Page. Hay que aparcar el coche cerca de la carretera (hay un área de aparcamiento) y caminar durante unos 10-15 minutos de calor desértico hasta el borde. Ahí ya solo te queda perder el aliento con los 300 metros de caída.
El Antelope Canyon es un cañón de no mucha longitud excavado durante millones de años por el agua de lluvia. Se encuentra en la reserva de los indios Navajos y su visita solo puede ser realizada mediante guía. Todas distinguen entre diferentes horarios, siendo el de mediodía el más recomendable porque es cuando la luz del sol entra de forma directa a través de las grietas permitiendo disfrutar de imágenes como esta.
California State Route 1
“Ventura Highway in the sunshine,
where the days are longer
the nights are stronger than moonshine,
you’re gonna go I know.”
Lo canta América en su Ventura Highway, y es que uno de los principales placeres de las tierras norteamericanas es surcar sus millas y millas con la compañía del asfalto, el sol y el inconfundible tacto de la libertad sobre tu mejilla.
La California State Route 1 es otra de las rutas míticas de Estados Unidos (a parte de la mítiquísima route 66) que bordea durante más de 1000 kilómetros la espectacular costa oeste, siendo especialmente atractiva en su tramo entre San Francisco y Los Ángeles.
Mariposa Grove
Mariposa es el hogar de uno de los seres vivos más gigantescos del planeta. Es uno de los lugares más conocidos para poder visitar sequoias y se encuentra cerca de Wawona, al lado de la entrada sur del Valle de Yosemite. Entre los cientos de ejemplares adultos de esta especie que se levantan en Mariposa, dos de ellos se encuentran entre las 30 sequoias más grandes del planeta. Y lo mejor es que en la foto estoy con uno de los “pequeñitos”…
Estudios de la Warner
Algo freak tenía que meter en esta lista y no solo de naturaleza podía hablar. Dentro del inmenso (y no especialmente agraciado) Los Ángeles, se encuentra una de las mecas para los amantes del cine: Hollywood y sus estudios. En esta ocasión hablo de los de Warner (también están los de Universal, pero esos no los visité) donde podéis caminar entre los decorados de Friends, Big bang Theory, Casablanca, películas varias de Clint Eastwood… Y para todos aquellos que vayáis, he de haceros una recomendación: pedid la visita guiada en español con Bob. No lo olvidaréis jamás.
Bryce Canyon
Este cañón del sur de Utah tiene poco de cañón realmente. Es un enorme anfiteatro de “chimeneas de hadas” y se extiende bajo uno de los aires más puros de toda la costa oeste. Esas chimeneas de hadas son estructuras de piedra erosionadas por el aire y el agua. Sus texturas y colores mezclados entre rojo, naranja y blanco hacen que te transportes a un lugar solo presente en los relatos fantásticos.
San Francisco
“Retumban, ardientes, los corazones en la intensa y dormida ciudad de niebla”. Una de esas ciudades que si te pones a pensar un día cualquiera es de las primeras que te viene a la mente que querrías visitar. Y es que el cine, la literatura, la historia no han parado de presentárnosla por cada una de sus caras. Y con razón. Cada rincón de esta gran ciudad guarda un pequeño tesoro envuelto en comida china, pasta italiana y notas de jazz rabioso. Mucho hay que ver por cada rincón de esta ciudad que vio crecer a mitos, y morir a tantos y tantos seres anónimos. Peroahí sigue, mostrando, insolente, desde Sus colinas, la cara y la cruz de su luminosa decadencia.
Gran Cañón
Su nombre es tan descriptivo ya por si solo que realmente da miedo no mejorarlo con lo que se quiera decir de él. Silencio, solo silencio, eso es lo que te acompaña cuando estás parado frente a esa enorme brecha en la corteza planetaria. No hay cabida a nada más. Es tan apabullante verlo ahí, desparramado, certero, como el impacto de un enorme cuchillo de dimensiones cósmicas, que te contienes la respiración por no estropear cada uno de los instantes. La gente se difumina en infinitésimas hormigas asomada desde cualquiera de sus miradores y, hasta pasado un buen rato, no te das cuenta de que llevas 10 minutos con la boca abierta.
Yosemite
Lo pongo el 1. Y no es que haya sido fácil la decisión con todo lo que ya os he dicho… pero Yosemite tiene algo. Tiene algo que ya empieza por su nombre, que proviene de los pueblos Ahwahnechee que habitaron las tierras en un pasado no muy lejano. Con un área de más de 3000 km km², lo más famoso es el valle glaciar de Yosemite, con su profunda forma de U y sus paredes descomunales.
Roca, agua y bosque se funden dentro de él desbórdándose sin moderación, cada cual queriendo ser la que se lleve los honores. Paraiso de escaladores con paredes de casi un kilómetro de altura, y placer de excursionistas que, caminen por donde caminen, encuentran a cada instante un nuevo motivo para haber dedicado un día de su vida a visitar Yosemite.
Yellowstone
Era un sueño de pequeño. Y sí, lo admito, en parte era por ver al oso Yogui. Y también por el morbo que hay detrás de la gran amenaza.
Yellowstone está “ligeramente lejos” de la ruta habitual de la costa oste, pues el parque se encuentra a unos 600 km al norte de Salt Lake city, que se encuentra, a su vez a unos 430 del Bryce Canyon, el lugar “más cercano” de la ruta habitual. Eso implica más horas de coche y días de viaje o un vuelo interno hasta las proximidades de Yellowstone (a Idaho Falls o a Jackson).
Lo importante es que Yellowstone es descomunal. Tan grande como la comunidad de Madrid y tan letal como absolutamente asombroso. Este supervolcán es una de las bombas de relojería planetarias. Piscinas hirvientes de mil colores, geisers esparcidos por toda el área como si fuesen champiñones, un cañon fluvial con caídas de agua de casi 100 metros, bisontes, renos, ciervos y osos campando a sus anchas… Solo os puedo decir que tenéis que verlo para poder creerlo.